Y entonces ocurrió la desgracia. Hace no mucho puse unas fotos de los lobos marinos de Valdivia por petición de un amiguete, dichas criaturas de Dios se sitúan a unos 200 metros de mi oficina. Los bichos son bonitos en documentales y en fotos, pero los condenados son peligrosos. Tienen malas pulgas, y claro, ocurren desgracias.
Esto es demasiado surrealista, a mi me tiene superado.
Ahí va la noticia: "Lobo mordió a vendedora de Feria Fluvial"
Aquí la portada del diario
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3 comentarios:
Pues sí que deben ser peligrosas las criaturitas.
Por lo menos ya puedes confirmar que son lobos y no leones.
Hombre, así en la foto no parece para tanto. Eso sí, la tía debió llevarse un susto pardo. Tú, por si acaso, no te acerques mucho.
Si es que tenía que pasar! Con esa pinta y ese nombre tienen que ser agresivos! Un abrazo. Sindo.
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